Hoy quiero dedicar este nuevo episodio a hablar del tema de la comunicación, una herramienta que considero muy importante para llevar a buen puerto cualquier proyecto, ya sea profesional como personal. La comunicación es básica para poder no solo trabajar a gusto, sino también para poder alcanzar el éxito de un proyecto, ya que al fin y al cabo trabajamos para conseguir algo. Ese algo se podría resumir en cubrir unas necesidades. En el caso de la gestión de proyectos de conservación y restauración y, a grosso modo, ese algo sería la salvaguarda del patrimonio, aunque nos acerquemos a aproximemos a esa necesidad desde diversas vertientes o nos quedemos en diferentes niveles de actuación. La comunicación nos permite desgranar y establecer, a través de un continuo diálogo con todas las partes, lo que consideramos necesario conseguir o alcanzar en cada caso. No es tarea fácil y, añadiría, hay que intentar no hacerla más difícil de lo que es, lo que exige que seamos conscientes de no sólo qué comunicamos sino cómo nos comunicamos y en qué momento lo hacemos.