La comunicación durante el desarrollo del proyecto es básica para no sólo hacer difusión de nuestras actividades, sino para fidelizar a nuestro usuario y hacer que se crea nuestro proyecto, hagamos lo que hagamos.
La comunicación durante el desarrollo del proyecto es básica para no sólo hacer difusión de nuestras actividades, sino para fidelizar a nuestro usuario y hacer que se crea nuestro proyecto, hagamos lo que hagamos. Para ello es importante definir con detalle a nuestro usuario, ya que habremos diseñado el contenido para él, para satisfacerle, para ganar su confianza (recordemos la cadena de Contenido – Objetivos – Estrategia – Acciones – Destinatario, que explicamos en «Definir los destintarios de un proyecto«). ¿Quién es nuestro público objetivo? ¿Qué le ofrecemos o le queremos decir? ¿Qué necesita oír? ¿Por qué canales llegamos a él? ¿Cuándo es mejor comunicarnos con él? ¿Cuáles han sido los resultados de esa campaña de comunicación? Ese será nuestro trabajo de comunicación de cara al exterior y pensando en nuestro usuario, pero no olvidemos la comunicación con el resto de agentes externos (nuevos públicos a los cuales queremos llegar, entidades, proveedores, patrocinadores) y con los agentes internos (nuestro equipo gestor y de trabajo). Todo ello forma parte de la estrategia de comunicación: de cómo queremos que nos vean; cómo queremos que sean nuestras relaciones internas y externas; y de cómo vamos a transmitir nuestro mensaje. Una buena estrategia se basa en una buena imagen corporativa, ya que será la síntesis visual de nuestros valores y lo primero que van a ver de nosotros, y para ello existen expertos que nos pueden ayudar a conseguirla (diseñadores gráficos, publicistas).